viernes, 1 de mayo de 2009

Obama: 100 días después



El miércoles pasado, el presidente Barack Obama cumplió sus primeros 100 días en La Casa Blanca, cargando aún sobre sí con el peso de la peor recesión económica en ocho décadas, una mermada autoridad en el ámbito mundial y dos guerras impopulares.
No obstante, las señales han sido positivas, más aún tomando en cuenta que 100 días no es suficiente tiempo para que una administración pueda demostrar sus habilidades liderando un país. Y en cualquier caso según una encuesta develada ayer por el Washington Post y la cadena ABC, los números favorecen claramente a Obama.

La encuesta, realizada a una muestra de 1,072 adultos estadounidenses, mostró que un 63 por ciento de los encuestados consideraba que la Administración había logrado mucho o muchísimo; un 69 por ciento se mostró satisfecho, mientras que el 71 por ciento respaldaba su gestión en Irak y un 63 por ciento su gestión en Afganistán. Además, un 61 por ciento está de acuerdo con el levantamiento de las restricciones a Cuba y un 58 por ciento aprueba sus medidas económicas

Los diez aciertos

Estos primeros 100 días de mandato han probado ser de ardua labor para el Presidente, quien ha logrado varios e importantes aciertos que le han ganado la confianza tanto de sus seguidores como la de sus críticos.

1. Al día siguiente de ser electo, firmó un decreto prohibiendo la tortura y clausurando los centros de detención clandestina de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), operados en varios países alrededor del mundo.

2. Congeló los salarios de todos los empleados de la Casa Blanca que ganaban más de $100,000 al año y prohibió a funcionarios federales trabajar para los grupos de antesalistas (lobbyists) en Washington.

3. Firmó el desembolso de $787 mil millones de dólares para la nueva Ley de Estimulo Económico. El más grande recorte de impuestos en la historia de Estados Unidos.

4. Aprobó un programa de vivienda de $275 billones que se estima rescate a aproximadamente 9 millones de propietarios de casas.

5. Logró el cierre de la prisión de Guantánamo en Cuba, donde, según informes de la Cruz Roja Internacional, se llevaron a cabo actos de tortura contra los prisioneros por parte de los militares estadounidenses bajo órdenes directas de la administración Bush.

6. Levantó las restricciones para los viajes y el envío de remesas a Cuba tal y como lo había prometido en su campaña electoral. Esta medida para promover un cambio democrático en la Isla caribeña, beneficiará a millón y medio de cubano-estadounidenses.

7. En la pasada Cumbre de Las Américas, en Trinidad y Tobago, se presentó frente a sus homólogos latinoamericanos con un tono humilde y reconciliador logrando abrir lazos de comunicación con asiduos enemigos de la administración Bush como el presidente venezolano, Hugo Chávez.

8. Logró acuerdos con el presidente mexicano, Felipe Calderón, para implementar estrategias bilaterales contra el tráfico de drogas y armas en la frontera de ambos países.

9. Autorizó el uso de fondos federales para la investigación de células madre y abrió el flujo de recursos para organizaciones no gubernamentales que combaten el VIH, aunque estas apoyen el aborto.

10. Ha sido proactivo con el refuerzo de leyes ambientalistas, incluyendo la reestructuración de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) bajo la dirección de Lisa P. Jackson.


Los diez retos pendientes

No obstante, “evaluar a un presidente por sus primeros 100 días es un ejercicio fútil”, como sugiere Norman Ornestein, del American Enterprise Institute, organización que investiga las políticas públicas. Aún quedan asuntos de suma importancia que el Presidente tiene que enfrentar y que, a largo plazo, son los que determinarán el éxito de la administración Obama en la recapitulación del 2012.

1. La definitiva retirada de las tropas de Irak y el fin de la intervención estadounidense en ese país.

2. La conclusión del conflicto en Afganistán

3. El levantamiento definitivo de la economía.

4. Implementar el uso definitivo de energías renovables en Estados Unidos.

5. Lograr un acuerdo entre Israel y Palestina, donde el primero, principal aliado estadounidense, parece llevar la vanguardia en las agresiones contra civiles.

6. Renovar y mejorar el sistema educativo y el sistema de Salud Pública en los Estados Unidos permitiendo un seguro de salud y una educación asequible para todos.

7. Tal y como prometió durante su campaña, incluir estándares ambientales y laborales en acuerdos de comercio con otros países incluyendo la oposición y eventual eliminación de acuerdos como el Tratado de Libre Comercio en Centro América.

8. Investigar y procesar a funcionarios de la pasada administración que aprobaron el uso de métodos de tortura para la interrogación de prisioneros en la llamada “guerra contra el terrorismo”.

9. Aumentar la ayuda de Estados Unidos a nivel internacional a unos $50 billones en un período de cuatro años con el propósito de ayudar a países con altos niveles de pobreza como los del continente africano.

10. Lograr una solución pacífica y diplomática para la crisis en Corea del Norte.


Primeras voces críticas

La aceptación que ha tenido el Presidente en estos primeros 100 días no garantizará el éxito en los restantes 1,360 de su mandato. Así lo visualizan críticos y escépticos que aún consideran su labor como una “blanda”. Se le reprocha la falta de visión para buscar una solución concreta a la actual crisis financiera que, según el analista y asiduo crítico de la globalización, David Korten, “pone en relieve la necesidad de reemplazar el modelo económico dominante de crecimiento limitado por una economía circular que sea una réplica de la naturaleza”.
También fueron criticadas las desacertadas bonificaciones a los gigantes financieros de Wall Street y el estancamiento de varias promesas de campaña como la eliminación de contribuciones sobre ingresos a sectores específicos de la población y la congelación de la ley estatal de impuestos del 2009.

No obstante las criticas, Obama mantiene su popularidad intacta tanto dentro como fuera de su país y con frecuencia ha sido comparado con los presidentes más famosos de Estados Unidos, incluyendo Abraham Lincoln, John F. Kennedy y Franklin D. Roosevelt, guardando su mayor similitud con este último, tanto por las circunstancias que lo rodean como por el tamaño y alcance de su gestión. En la década de los treinta Roosevelt tuvo que lidiar con una brutal recesión económica y con un conflicto bélico de proporciones mundiales, muy parecido a la situación actual de Obama.

En lo que sí todos parecen estar de acuerdo es en que los primeros 100 días del presidente numero 44 de los Estados Unidos, han sido unos de los más activos y controvertidos en la historia del país. Es el tiempo el que pasará juicio sobre su labor administrativa en estos tiempos de precariedad económica, política y social.

jueves, 30 de abril de 2009

Del miedo y otros demonios criollos


Existe un ingrediente vital para gestar la receta de este coctel de polarización social en que vivimos: El miedo. Aquí se construye el día a día a base de la cantidad de miedos predeterminados. Le tememos a casi todo. Miedo al crimen y miedo a la justicia. Miedo a la recesión y miedo a la globalización. Miedo a la independencia y miedo a la estadidad. Miedo a la vida y miedo a la muerte. Miedo a callar y miedo a opinar. El mismo miedo que nos lleva a luchar guerras absurdas por países absurdos por razones aún más absurdas.

El miedo nos rige, nos gobierna, nos corroe. Dictamina cada una de nuestras decisiones. El miedo nos hace elegir “democráticamente” a políticos inescrupulosos que regirán nuestros destinos cada cuatrienio saqueando las arcas del país sin remordimiento alguno. El miedo evita que eduquemos efectivamente a nuestros hijos. El miedo nos hace seres inútiles. El miedo nos encierra dentro de religiones para no afrontar la realidad.El miedo nos hace bajar la cabeza frente a las injusticias. Nos hace aceptar el abuso a los niños, a la mujer, a los extranjeros, a los homosexuales y a los liberales. Si le tememos lo destruimos, lo segregamos, lo aislamos.

Pero este miedo jamás es impuesto. No, al contrario. Es sutilmente introducido como comercial televisivo o filosofía de vida. Como ensayo periodístico o fe religiosa. Como reforma educativa o movimiento político. El miedo es sembrado en nosotros sin que nos demos cuenta, tal y como sembraron en nosotros el miedo a las armas de destrucción masiva, el miedo al cataclismo universal y a la pandemia viral. Tenemos miedo a tener más miedo y tememos no saber qué hacer con este siempre creciente tumor de miedos infundados. El miedo nos exterminará como pueblo, como ciudadanos. Como seres humanos.